Sheinbaum demanda reciprocidad de EU en lucha contra tráfico de armas
La presidenta Sheinbaum pidió a EE.UU. mayor responsabilidad para frenar el tráfico de armas hacia México, que alimenta la violencia del crimen organizado
Un llamado urgente a la cooperación internacional resonó este martes desde Palacio Nacional. La mandataria mexicana, Claudia Sheinbaum, elevó la voz para exigir a Estados Unidos una mayor implicación en la lucha contra el flujo ilegal de armas hacia México. La problemática, según Sheinbaum, es un desafío compartido que requiere una respuesta conjunta y decidida.
Durante su conferencia de prensa matutina, la presidenta hizo hincapié en la alarmante realidad: un gran porcentaje de las armas que alimentan la violencia del crimen organizado en México provienen del norte. Sheinbaum recordó los avances logrados por México en la contención del tráfico de fentanilo hacia Estados Unidos, instando a reciprocidad en la lucha contra el tráfico de armas. "¿Es justo que solo un país asuma la responsabilidad?", cuestionó la mandataria, enfatizando la necesidad de una acción coordinada y efectiva en ambos lados de la frontera.
La conversación sobre la problemática, según la presidenta, ya ha tenido lugar en encuentros previos con el gobierno estadounidense, donde se cuestionó la facilidad con la que armamento militar, como lanzagranadas, llega a manos del crimen organizado en México. Se mencionó, además, el fallido operativo "Rápido y Furioso" como un ejemplo de las estrategias mal concebidas que solo agravan el problema. Sheinbaum recalcó la falta de consecuencias para los responsables de este operativo, que dejó un rastro de armas fuera de control en manos de criminales.
A pesar de la gravedad de la situación y del reciente revés en el Tribunal Supremo de Estados Unidos, que desestimó una demanda contra fabricantes de armas, Sheinbaum descartó la imposición de aranceles a las armas importadas legalmente como medida de contención. Sin embargo, manifestó su confianza en que la colaboración entre ambos países, como la expresada por el responsable interino de la ATF, Daniel Driscoll, puede generar resultados concretos y sostenibles en la lucha contra este flagelo que afecta a ambas naciones. El futuro de la cooperación bilateral dependerá, pues, de la voluntad política de ambos gobiernos para afrontar de manera seria y comprometida esta amenaza compartida.