Menor afluencia de deportados en albergue San Juan Bosco
Francisco Loureiro, director del albergue San Juan Bosco, reporta una caída sin precedentes en la recepción de personas deportadas o repatriadas
El albergue San Juan Bosco en Nogales, Sonora, ha registrado una disminución histórica en la recepción de personas deportadas o repatriadas. Durante las últimas semanas, la cifra se ha mantenido entre 10 y 15 individuos, un número sin precedentes en los más de 40 años de funcionamiento de la institución, según declaraciones de su director, Francisco Loureiro Esquer.
Esta notable reducción contrasta con las expectativas generadas por los anuncios del gobierno de Estados Unidos sobre intensivos operativos migratorios y el reciente aumento presupuestal para deportaciones masivas aprobado por la Cámara de Representantes. Incluso, los principales albergues de la zona, incluyendo el Mega Albergue en la Unidad Deportiva Estrellas Nogalenses, han experimentado una caída similar en el número de personas atendidas, un dato que sorprende considerando el programa "México te Abraza" implementado en la frontera.
Loureiro explicó que la mayoría de las personas deportadas recibidas en el albergue fueron detenidas durante operativos en sus lugares de trabajo o domicilios, a menudo por infracciones menores. Un porcentaje menor corresponde a familias que optaron por la autodeportación.
“Sí, definitivamente, la gran mayoría de las personas que hemos recibido han sido detenidas mediante operativos. Anteriormente recibíamos entre 150 y 200 personas diariamente, ahora son solo 10 a 15. Es una reducción significativa,” afirmó Loureiro.
Si bien muchas familias optan por la autodeportación, su estancia en la frontera suele ser breve, ya que muchos cuentan con planes para regresar a México con familiares o buscan apoyo en los programas de ayuda ofrecidos por el gobierno de Estados Unidos.
“Podemos estimar que aproximadamente un 70% de las personas que atendemos fueron detenidas en operativos. La disminución es enorme,” añadió el director del albergue.
A pesar de la disminución actual, Loureiro advierte que la situación podría cambiar. Las cifras reportadas por las autoridades estadounidenses y los testimonios de los migrantes sugieren que el número de personas en proceso de deportación sigue siendo elevado, dejando abierta la posibilidad de un incremento en el futuro.