Agente herido gravemente en ataque armado a centro de detención de Texas
La madrugada del 4 de julio, mientras Estados Unidos celebraba su Día de la Independencia, un grupo fuertemente armado ejecutó un ataque coordinado contra las instalaciones del Centro de Detención de Prairieland en Alvarado, Texas
Una ola de violencia sin precedentes sacude las instalaciones migratorias de Texas, dejando a un agente de ICE gravemente herido y elevando las alertas de seguridad a nivel nacional. El incidente, ocurrido en Dallas, involucró un ataque coordinado contra agentes federales, dejando en evidencia una creciente amenaza a la seguridad pública.
Los detalles del ataque son escalofriantes:
- Un equipo de 11 individuos, fuertemente armados y equipados con tácticas militares, irrumpió en un centro de detención de ICE.
- Tras un intercambio de disparos, un agente resultó herido de gravedad, pero se encuentra actualmente en recuperación, según confirmó el director interino de ICE en Dallas, Josh Johnson. "Estamos agradecidos por la rápida respuesta de nuestros agentes y la colaboración con las fuerzas del orden locales", añadió Johnson.
- Gracias a una operación conjunta del FBI y la policía local, 10 de los sospechosos fueron capturados y enfrentan cargos por terrorismo y asalto agravado contra servidores públicos.
- La búsqueda del undécimo atacante, aún prófugo, continúa bajo la dirección del sheriff del condado de Johnson.
Las autoridades investigan las motivaciones detrás de estos ataques, que se producen en medio de un alarmante incremento del 700% en agresiones contra instalaciones migratorias en los últimos meses. Estos incidentes, que incluyen desde actos de vandalismo hasta ataques armados coordinados, demuestran una escalada peligrosa en la violencia contra las fuerzas del orden.
El incidente en Dallas no es un caso aislado. Un ataque similar contra un agente de la Patrulla Fronteriza en McAllen, Texas, solo dos días después, refuerza la preocupación por la seguridad de los agentes federales. En California, un incidente similar involucró un ataque físico y el embestida de un vehículo oficial. Las autoridades federales han intensificado las medidas de seguridad en todos los centros de detención mientras la investigación continúa.
La situación exige una respuesta contundente y coordinada de las autoridades para garantizar la seguridad de los agentes y las instalaciones migratorias. La comunidad internacional observa con preocupación la creciente ola de violencia que amenaza la estabilidad y la seguridad de la región.
