Drake Bell despide a su ingeniero de sonido durante concierto en Puebla

La Feria de Puebla, un torbellino de luces, música y aromas, se ha consolidado como un punto clave en el calendario de eventos mexicanos. Este año, la expectativa era palpable, una mezcla de ilusión y anticipación que flotaba en el ambiente

Drake Bell despide a su ingeniero de sonido durante concierto en Puebla

La Feria de Puebla vibró con la energía de miles de asistentes, ávidos por disfrutar de un cartel estelar. Sin embargo, una sombra se proyectó sobre la noche: el controvertido despido de su ingeniero de audio por parte de Drake Bell.

El cantante estadounidense, en el marco de su "Non-Stop Flight Tour Vol. 1", prometió una velada inolvidable con éxitos como "Found a Way" e "I Know". La expectativa era alta, pero la realidad distó de ser perfecta.

En medio del concierto, ante la frustración creciente por problemas técnicos recurrentes, Drake Bell tomó la drástica decisión de despedir públicamente a su ingeniero de audio. El momento, capturado en videos que se viralizaron rápidamente, generó un debate en redes sociales sobre la responsabilidad y la presión en eventos de esta magnitud.

Los asistentes reportaron una noche plagada de fallas de sonido que, lejos de ser mínimas, afectaron considerablemente la experiencia. A pesar de los contratiempos, Drake Bell, demostrando profesionalismo, intentó mantener el show en marcha, luchando contra las adversidades técnicas.

La polémica generada por el despido, sin embargo, eclipsó parcialmente la presentación del artista. Mientras algunos aplaudieron la aparente firmeza de Bell en exigir calidad, otros criticaron la forma pública y humillante del despido. La Feria de Puebla, a pesar de todo, demostró su capacidad de atraer a grandes nombres internacionales, pero también puso de manifiesto la importancia crucial de una planificación y ejecución técnica impecable para asegurar un concierto exitoso.

El incidente sirve como un recordatorio de la complejidad de la producción de eventos masivos, dejando al descubierto la fragilidad del engranaje y la responsabilidad compartida entre el artista, la producción y el equipo técnico para garantizar una experiencia inolvidable para el público.