Muncy impulsa victoria de Dodgers por 12-0 sobre Cardenales

El bateo de los Dodgers de Los Ángeles despertó con furia este martes en el Busch Stadium. Tras una actuación discreta el lunes, el equipo californiano descargó su poder ofensivo contra los Cardenales de San Luis en un duelo que terminó con marcador de 12-6

Muncy impulsa victoria de Dodgers por 12-0 sobre Cardenales

Una lluvia de jonrones y una ofensiva imparable sellaron la contundente victoria de los Dodgers sobre los Cardenales, dejando claro quién manda en la Liga Nacional.

El regreso de Max Muncy fue la chispa que encendió la pólvora. Tras un mes de ausencia por lesión, el tercera base desató toda su furia, conectando dos jonrones y registrando una línea ofensiva de "5-4, con cuatro carreras impulsadas y tres anotadas". Su primer cuadrangular, un misil de 416 pies al jardín derecho, fue un anuncio inequívoco de su regreso a la élite.

  • Teoscar Hernández (5-4) respondió a la potencia de Muncy con dos jonrones propios, demostrando una ofensiva explosiva.
  • Mookie Betts, fiel a su estilo, contribuyó con tres hits, confirmando su consistencia al bate.
  • El bullpen de los Cardenales sucumbió ante la arremetida ofensiva, concediendo seis carreras limpias tras el titubeante inicio de Miles Mikolas (6-9).

Los Dodgers, con un total de 17 hits, encontraron en Emmet Sheehan (3-2) un sólido apoyo en la lomita. El lanzador emergente se lució con cinco entradas impecables: cero carreras, cuatro hits permitidos y cinco ponches. Una actuación contrastante con la noche para el olvido del equipo de San Luis, donde solo el jonrón de dos carreras de Nolan Gorman en la segunda entrada ofreció un breve respiro.

Entre los jugadores latinos, el dominicano Hernández destacó con cuatro carreras impulsadas, mientras que los venezolanos Willson Contreras y Yohel Pozo registraron hits para los Cardenales. El panameño Iván Herrera finalizó con 4-1 y una impulsada en la derrota.

La victoria de los Dodgers (66-48) no solo reafirma su liderato en la División Oeste, sino que envía un mensaje claro a la Liga Nacional: cuando su ofensiva está a pleno rendimiento, son prácticamente imparables.