LA 2028: Olimpiadas en Confianza a Pesar de los Retos
Los funcionarios olímpicos reunidos el miércoles en Suiza adoptaron una perspectiva calmada y a largo plazo sobre los Juegos de Verano de 2028 en Los Ángeles, después de días de imágenes de militares desplegados y coches en llamas en las calles de la ciudad anfitriona.
A pesar del complejo panorama político y social que envuelve a Los Ángeles, la llama olímpica de 2028 sigue brillando con fuerza. Así lo dejaron entrever el presidente del COI, Thomas Bach, y el presidente de World Athletics, Sebastian Coe, durante la reunión anual del ASOIF en Suiza.
Coe, evocando la experiencia de Londres 2012, afirmó: “Estos son los altibajos. Solo tienes que adaptarte”, restando importancia a la cobertura mediática sensacionalista de la situación en la ciudad californiana.
Bach, por su parte, enfatizó el firme apoyo del gobierno de Estados Unidos, el gobernador de California y el alcalde de Los Ángeles al proyecto olímpico, un respaldo crucial considerando las recientes tensiones políticas y las controversias protagonizadas por el presidente Trump. La reunión del ASOIF transcurrió con una notable serenidad, con Nico Campriani, vicepresidente de deportes del comité organizador de Los Ángeles 2028, priorizando la finalización del calendario de competencias.
Selección Mexicana cambia hotel por protestas en Los ÁngelesEl COI, manteniendo su neutralidad política, evitó pronunciarse sobre las controversias internas. Bach, cuyo mandato concluye próximamente, destacó la capacidad de resiliencia de Los Ángeles, citando su recuperación tras los incendios forestales como prueba de su fortaleza. Su sucesora, Kirsty Coventry, tendrá como prioridad una reunión con el presidente Trump.
Las garantías gubernamentales sobre financiación y visados, clave para la adjudicación de los Juegos en 2017, siguen siendo un pilar fundamental. Ingmar de Vos, presidente del ASOIF, mantiene su confianza plena en la capacidad organizativa de Los Ángeles, reiterando su fe en el estado, la ciudad y su gente.
El desafío de organizar los Juegos Olímpicos de 2028 en medio de un complejo entramado de protestas, despliegue militar y tensiones políticas es innegable. Sin embargo, el optimismo de las autoridades deportivas prevalece, confiando en la capacidad de Los Ángeles para superar los obstáculos y celebrar unos Juegos exitosos y memorables.
