Sabalenka rompe la racha de Swiatek en Roland Garros
La número uno del mundo, Aryna Sabalenka, puso fin a la racha de 26 victorias consecutivas de Iga Swiatek en el Abierto de Francia y alcanzó por primera vez la final de Roland Garros al ganar el jueves 7-6 (1), 4-6, 6-0 una semifinal de ida y vuelta.
El silencio en la cancha era ensordecedor, roto solo por el susurro del viento entre las hojas de los árboles que rodeaban la Philippe Chatrier. La tensión era palpable, una energía casi tangible que envolvía a todos los presentes.
Pero el rugido de la multitud explotó al final, un tsunami sonoro que celebraba el fin de una era y el comienzo de otra. Aryna Sabalenka, la número uno del mundo, había logrado lo impensable: poner fin a la imbatible racha de 26 victorias consecutivas de Iga Swiatek.
En una batalla titánica, un partido que pasará a la historia del tenis, Sabalenka superó a Swiatek en un electrizante enfrentamiento semifinal, con un marcador final de 7-6 (1), 4-6, 6-0. Las lágrimas de Swiatek, la decepción palpable en su rostro, contrastaban con la euforia desbordante de Sabalenka, quien gritó de alegría, liberando la tensión acumulada durante el intenso encuentro.
Este triunfo no solo significa el fin de la era Swiatek, sino que catapulta a Sabalenka hacia su primera final en Roland Garros. Una victoria que la acerca a su cuarto Grand Slam, y el primero fuera de canchas duras, un logro monumental en su ya brillante carrera. El peso de la historia, la presión de la expectativa, todo se desvaneció con la última bola.
Más aún, la victoria le permite a Sabalenka recuperar el puesto número uno del ranking WTA, arrebatándoselo a Swiatek. Un cambio de guardia en la cima del tenis femenino mundial, inesperado pero merecido.
Su rival en la final será la sorprendente Lois Boisson, la jugadora francesa que, como comodín, ha dejado sin aliento al mundo entero, derrotando a la número dos del ranking, Coco Gauff, en un partido que definirá el rumbo de esta edición de Roland Garros. Una final completamente inesperada, un giro radical de los pronósticos.
El sábado, el mundo del tenis tendrá sus ojos fijos en París. La pregunta que todos se hacen retumba en el aire: ¿Podrá Lois Boisson, la Cenicienta del torneo, coronarse campeona? La respuesta, solo el tiempo la revelará.