Cierre fronterizo causa millonarias pérdidas a ganaderos
La suspensión de exportaciones de reses hacia Estados Unidos afecta a más de 100 mil cabezas de ganado; productores buscan alternativas en el mercado nacional con pérdidas de hasta 40%
El cierre de la frontera entre México y Estados Unidos a la importación de ganado ha generado una crisis en el sector ganadero sonorense, con pérdidas estimadas entre 1,000 y 1,500 millones de pesos, según alertó el presidente de la Unión Ganadera Regional de Sonora, Juan Carlos Ochoa Valenzuela. Esta situación, derivada de la detección de gusano barrenador en el sur del país, ha afectado el cruce de entre 100,000 y 150,000 animales a través de las estaciones cuarentenarias de Nogales y Agua Prieta.
La imposibilidad de exportar a Estados Unidos, principal mercado para el ganado sonorense, ha dejado a los productores con un serio problema. "La diferencia de precio entre el mercado estadounidense y el nacional es de aproximadamente 10,000 pesos por cabeza", explicó Ochoa Valenzuela. "Con 100,000 cabezas, las pérdidas son significativas. Aún así, mantengo el optimismo, esperando la reapertura de la frontera y la recuperación de los mercados. La demanda en Estados Unidos sigue siendo fuerte, y eso nos da esperanzas", agregó.
Ante esta situación, algunos ganaderos han tenido que buscar alternativas para mitigar las pérdidas. "Una parte del ganado, quizá un 30%, se ha dirigido al mercado nacional, pero con una pérdida considerable de entre 30 y 40% del precio. Recordemos que el ganado es un producto perecedero, y tenemos que venderlo, cueste lo que cueste," señaló el líder ganadero.
Las estrategias de comercialización alternativas, si bien han ayudado a algunos, no compensan las millonarias pérdidas que afectan a todo el sector. La incertidumbre sobre la reapertura de la frontera mantiene en vilo a los ganaderos sonorenses, quienes enfrentan un futuro incierto para una de las actividades económicas más importantes del estado. La presión sobre el gobierno mexicano para resolver la situación y reabrir el mercado estadounidense es cada vez mayor.
El impacto de esta crisis se extiende más allá del ámbito económico, afectando la estabilidad de miles de familias que dependen de la ganadería para su sustento. La falta de soluciones a corto plazo podría provocar una crisis social de grandes proporciones en la región.
