Luces de Navidad: símbolo de esperanza que transforma hogares y ciudades

La colocación de luces navideñas son toda una tradición universal que mezcla religión, cultura y espectáculo urbano, que para muchos expresa la alegría, la esperanza y fe en esta temporada de fiestas decembrinas.

Desde finales de noviembre de cada año, muchas familias colocan en las paredes de sus hogares en Nogales, Sonora, todo tipo de luces con extensiones que cubre parte de sus fachadas, mientras que la industria en el mundo entero hace lo propio con desfiles y comerciales, los gobiernos se unen en la colocación de estos ornatos por calles y plazas principales de cada entidad.

El simbolismo representa la luz de la esperanza, la alegría y la fe en un mundo mejor, es una forma de celebrar la llegada de la Navidad y compartir la felicidad con familiares y amigos, siendo los niños quienes más lo disfrutan.

Las luces agregan un toque mágico y festivo a los hogares y espacios públicos, creando un sentido de comunidad y pertenencia un ambiente acogedor y alegre. Por tradición es una costumbre que se ha transmitido de generación en generación, especialmente en países con inviernos oscuros, donde las luces ayudan a iluminar el paisaje.

Sin embargo, algunas personas no instalan luces en esta temporada por diversas razones una de las más reales es que la luz por el uso de electricidad puede ser costosa, y algunas personas no se sienten cómodas con el gasto o no pueden costearlo.

También está el factor tiempo y esfuerzo de instalar y desinstalar estas luces que puede ser un trabajo tedioso y consumir mucho tiempo, para algunas personas con problemas de salud o movilidad es físicamente imposible al no tener la ayuda necesaria.

Existen otros casos de preferencias personales personas que no se sienten identificadas con la tradición por cuestiones de religión o por creencias distintas que no celebran la Navidad de esa manera. O incluso hay personas que pueden preocuparse por el impacto ambiental de las luces y el consumo de energía: Algunas personas prefieren una decoración más minimalista o no les gusta la Navidad, todo un Debate entre la Tradición y la Individualidad.

Por ello es importante respetar las decisiones de cada persona y encontrar formas de celebrar la temporada que se adapten a nuestras propias creencias y tradiciones. Al final, la Navidad es un momento para compartir con los seres queridos y encontrar la alegría y la paz en nuestras vidas.

La tradición de las luces navideñas es disfrutada por personas de todas las edades, pero especialmente por los niños y las familias. En muchos países, como Colombia, la Navidad es una época de celebración y unión familiar, donde las luces y decoraciones navideñas crean un ambiente mágico y festivo.

Datos

El gasto de colocar luces navideñas en los hogares puede variar dependiendo del tipo de luces, la cantidad y el tiempo de uso.

- Luces LED: Consumen alrededor de 6-8 watts por hora, lo que se traduce en un gasto de 30 a 150 pesos mexicanos al mes, dependiendo del uso.

- Luces incandescentes: Consumen alrededor de 40-70 watts por hora, lo que puede aumentar el gasto a 200 a mil 800 pesos mexicanos al mes.

Algunos ejemplos de consumo y gasto

- Un árbol de Navidad con 400-600 luces LED puede consumir 25-40 watts y costar 32 a 38 pesos mexicanos al mes.

- Una casa con decoración moderada (300 luces LED) puede consumir 73.5 kWh y costar de 90 a 110 pesos mexicanos al mes.

- Una casa muy iluminada con luces incandescentes (1,500 watts) puede consumir 480 kWh y costar de mil 200 a mil 800 pesos mexicanos al mes.

- Niños: Los niños son los que más disfrutan de las luces navideñas, ya que les permite experimentar la magia y la emoción de la Navidad.

- Familias: Las familias también disfrutan de esta tradición, ya que les permite pasar tiempo juntos y crear recuerdos especiales.

- Comunidades: Las comunidades también se benefician de las luces navideñas, ya que crean un ambiente festivo y acogedor en las calles y plazas.

Aproximadamente 2.000 millones de personas en todo el mundo celebran la Navidad cada año, lo que representa alrededor del 26% de la población mundial. Esto la convierte en una de las festividades más celebradas a nivel global

En algunos países, la Navidad es una celebración muy arraigada, como en Estados Unidos, donde el 90% de la población la celebra. En México, por ejemplo, el 81.6% de la población celebra la Navidad, y de ellos, el 97% lo hace con la familia.