Edificio centenario derribado tras incendio era parte del origen de Nogales

El edificio incendiado en la calle Elías y que posteriormente fue derribado tenía más de 100 años de construcción y nace desde la creación de la primera Aduana de Nogales en el año 1880 por decreto de Porfirio Díaz.

El Cronista Municipal de Nogales, Sonora, Julio César Sarmiento, dio a conocer el interés de documentar parte de la historia de dicha edificación con el rescate de materiales y que en un futuro puedan ser exhibidos en el Museo de Nogales.

Tenemos que rescatar algunos materiales que son útiles para un futuro Museo de Nogales, la construcción de este edificio tiene mínimo 100 años a juzgar por sus materiales que es de adobe y de la tierra característica de la zona, fue construido a fines del siglo 20, en el primer cuadro de la ciudad.

Nogales nace por el decreto de Porfirio Díaz el 2 de agosto de 1880, se instala la Aduana en esta misma zona donde estamos en esta fecha señalada, esta zona fue desarrollada a raíz de la llegada de la Aduana, en el primer cuadro lo que es la cuna del nacimiento de Nogales, explicó Sarmiento.

El cronista municipal, detalló que esperan rescataran piezas de adobe, baldosas y maderos que fueron parte de los materiales con los que se construyó dicho lugar como muchos de otras edificaciones de la zona.

Lo que esperamos rescatar aquellos que estamos dedicados a la historia de Nogales, es el material de construcción que tiene más de 100 años de origen como son los clásicos adobes, como hay otras edificaciones de Nogales, situación ya platicada con las autoridades específicamente con el Secretario del Ayuntamiento.

Lo primero será extraer algunos adobes para ponerle su texto apropiado que indique se construcción parte de la cuna del centro del centro histórico de Nogales, concluyó.

En los últimos años la edificación fue utilizada como centros nocturnos, posteriormente quedo en estado de abandono por varios años hasta ser vandalizada e invadida por malviviente del sector, quienes la utilizaban para resguardarse, vender y consumir drogas, ocasionando dos incendios el último registrado el pasado 2 de diciembre del 2025, cuando las autoridades estatales y municipales tomaron la decisión de su derribo controlado, hasta el momento se desconoce quiénes son los propietarios.