Avanza la reubicación de las vías ferroviarias en Nogales
Los rieles que dividieron Nogales ahora unirán su alma: donde antes pasaban trenes de carga, pronto caminarán esperanzas.
En un giro inesperado para el desarrollo urbano de Nogales, Sonora, las vías del ferrocarril —que por décadas dividieron la ciudad como una herida de acero— están a punto de convertirse en un puente hacia el futuro. El alcalde Juan Francisco Gim Nogales reveló que, más que una simple reubicación, se está tejiendo una nueva identidad para el corazón de la ciudad.
No se trata solo de mover rieles, sino de devolverle a Nogales su espacio, su respiración. Lo que antes era un obstáculo se convertirá en una ciclovía, un parque lineal y un eje cultural que conecte barrios separados por décadas de ruido y polvo.
Aunque el gobierno federal ajustó el alcance del proyecto para integrarlo al nuevo tren turístico que pretende unir la frontera con destinos históricos del norte, las obras no se detuvieron: se transformaron. La terminal de carga ya no será el foco principal; en su lugar, surgirá una estación multifuncional que albergará museos, espacios de emprendimiento y zonas verdes.
La decisión de rediseñar no fue un retroceso, fue una evolución. Ahora, el tren no solo transporta mercancías: transporta esperanza, turismo y memoria colectiva.
Desde su arranque en junio de 2023, el proyecto ha movilizado más de 1,200 millones de pesos federales, con avances del 47% en la nueva traza. Y aunque la meta sigue siendo 2026, lo que antes se prometía como una solución logística ahora se perfila como un símbolo de renacimiento: donde antes pasaban los trenes, pronto caminarán niños, ciclistas y visitantes que descubrirán que Nogales no solo vive al borde de la frontera… sino que ahora, también, vive por encima de sus rieles.
