Gobierno mantiene precio de la gasolina magna en 24 pesos
En medio de un panorama económico complejo, donde los precios de los combustibles siguen siendo un tema sensible para millones de mexicanos, el gobierno federal anunció una medida que busca aliviar el bolsillo de las familias; la presidenta Claudia Sheinbaum confirmó este miércoles la renovación del acuerdo que mantiene el precio de la gasolina magna en 24 pesos por litro, una estrategia que originalmente se implementó como medida temporal
La mandataria federal concluyó su conferencia matutina en Palacio Nacional con un anuncio crucial para la economía nacional: la extensión del acuerdo voluntario que mantiene el precio de la gasolina magna por debajo de los 24 pesos. "Hemos llegado a un acuerdo crucial para la economía nacional que beneficia a millones de mexicanos", afirmó la mandataria, destacando la colaboración con el sector energético.
Este pacto, oficialmente denominado 'Política Nacional para Promover la Estabilización del Precio de la Gasolina en Beneficio del Pueblo de México', firmado inicialmente el 28 de febrero de 2025, se extenderá más allá de su fecha de vencimiento original en agosto. Su éxito depende de la colaboración entre el gobierno y los gasolineros, quienes han demostrado su compromiso con la estabilidad de precios.
Entre las figuras clave que han hecho posible esta iniciativa se encuentran:
- Víctor Rodríguez, director general de Pemex
- Luz Elena González, secretaria de Energía
- Juan José Vidal, subsecretario de Hidrocarburos
- Jorge Mijares Casas, presidente de Onexpo Nacional
La naturaleza voluntaria del acuerdo, a diferencia de los controles de precios rígidos, ha sido un elemento central de la discusión. Se basa en un consenso entre el gobierno y los empresarios gasolineros, quienes, según Jorge Mijares, mantendrán reuniones periódicas para ajustar la estrategia según sea necesario. La apertura al diálogo y la flexibilidad del acuerdo son elementos clave para su éxito continuo.
Si bien el acuerdo prioriza la estabilidad de precios para el consumidor, algunos expertos advierten sobre posibles consecuencias. Las diferencias regionales en los costos logísticos podrían afectar la viabilidad de algunas estaciones de servicio, especialmente en zonas remotas. Esta desigualdad podría, según estos expertos, favorecer la aparición de mercados negros de combustible, un riesgo que el gobierno deberá mitigar.
La prolongación del acuerdo llega en un contexto de incertidumbre económica global, con presiones inflacionarias persistentes. El gobierno ha apostado por la estabilidad de los precios de la gasolina como una medida fundamental para paliar el impacto en la economía mexicana. El futuro del acuerdo y su capacidad para mantenerse a largo plazo dependerá de la constante adaptación a las realidades del mercado y de la continua colaboración entre los sectores público y privado. El camino por recorrer requiere vigilancia y una evaluación continua de su efectividad.