Sheinbaum critica declaraciones del fiscal sobre caso Ayotzinapa
La jornada matutina en Palacio Nacional estuvo cargada de temas relevantes, desde proyectos hídricos hasta la búsqueda de consensos con la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE). Sin embargo, un asunto eclipsó por momentos la agenda: las declaraciones del fiscal del caso Ayotzinapa, Rosendo Gómez Piedra
La indignación se desató. Familiares de los 43 normalistas de Ayotzinapa, tras una tensa reunión con la presidenta Claudia Sheinbaum y el fiscal Rosendo Gómez Piedra, exigen públicamente su destitución. La conferencia de prensa posterior fue escenario de fuertes críticas y acusaciones de falta de sensibilidad e ineficacia.
El detonante fue la frase del fiscal Gómez Piedra: "Los avances, tenemos 120 detenidos, más de 46 causas penales, llevamos más de 800 lugares visitados en la sierra buscando los cadáveres". Para los familiares, esta declaración, fría y centrada en cifras, minimiza el dolor humano y la falta de resultados concretos en la búsqueda de sus hijos desaparecidos.
"Es una burla", afirmó Melitón Ortega, vocero de los padres de los 43, quien añadió: "Las cifras no nos devuelven a nuestros hijos. Llevamos años escuchando promesas vacías y la corrupción al interior de la fiscalía está obstruyendo la justicia. Exigimos la remoción inmediata del fiscal Gómez Piedra y un equipo que trabaje con transparencia y verdadera empatía." Las acusaciones de corrupción, ya conocidas, se reiteraron con fuerza, reforzando la demanda de un cambio radical en la investigación.
La petición de la remoción del fiscal no es nueva, pero la intensidad y unidad de los familiares, tras la reunión con la presidenta Sheinbaum, marca un punto de inflexión en el caso. La presión social se intensifica, exigiendo una investigación imparcial y efectiva que ponga fin a la impunidad y ofrezca justicia a las familias de los 43 normalistas. La respuesta de la presidenta Sheinbaum, quien se limitó a expresar la necesidad de seguir trabajando en el caso, ha sido recibida con escepticismo.
El futuro de la investigación pende de un hilo. La presión por la destitución de Gómez Piedra es innegable y el caso Ayotzinapa, lejos de desvanecerse, se mantiene como una herida abierta en la conciencia nacional, con la justicia aún pendiente para las víctimas y sus familiares.
