Trump propone plan para Gaza: acceso ilimitado a alimentos
El panorama humanitario en Gaza sigue marcado por la urgencia. Mientras las imágenes de niños desnutridos circulan en medios internacionales, un nuevo anuncio busca cambiar la narrativa; Donald Trump, desde su complejo de golf en Escocia, reveló un plan que promete acceso directo a alimentos sin las restricciones actuales
Las negociaciones de paz en Gaza siguen en punto muerto, con Estados Unidos e Israel abandonando las mesas de negociación en Qatar, acusando a Hamás de obstrucción. Sin embargo, una inesperada propuesta del presidente estadounidense, Donald Trump, ha generado un debate global: la instalación de centros de alimentos sin vallas en Gaza.
"No vamos a permitir que la burocracia y las barreras impidan que la gente tenga acceso a comida", afirmó Trump en una declaración que sorprendió por su tono inusualmente conciliador, aunque matizado con duras críticas al manejo de la crisis. La colaboración con el Reino Unido, según el presidente, ya está en marcha, aunque se negó a dar detalles sobre la logística del proyecto, generando especulaciones sobre su viabilidad.
Los puntos clave del ambicioso proyecto:
- Un financiamiento aún no especificado, que generará dudas sobre su transparencia y la magnitud real de la ayuda.
- La selección de ubicaciones estratégicas para minimizar el riesgo de que los centros sean controlados por grupos armados, un gran desafío en el contexto gazatí.
- Una crítica velada al gobierno israelí: "Es inconcebible que haya comida a tiro de piedra y que la gente muera de hambre", declaró Trump, generando tensión en la ya frágil relación bilateral.
El contexto es crucial. La situación en Gaza ha sido calificada de "catastrófica" por el primer ministro británico, Keir Starmer, quien, tras su encuentro con Trump, ha priorizado la ayuda aérea a través de Jordania, en contraste con el enfoque físico de Estados Unidos.
La declaración más controversial llegó cuando Trump se mostró reticente a respaldar completamente a Benjamin Netanyahu, respondiendo con un simple "No particularmente" cuando se le preguntó si compartía la negación israelí de la hambruna. Aunque rápidamente culpó a Hamás por el desvío de suministros, la declaración ha roto con la tradicional postura de su partido, generando incertidumbre sobre la dirección de la política exterior estadounidense en la región.
A pesar del pesimismo general, Trump afirmó que un alto al fuego es "posible", sin embargo, no ofreció plazos ni estrategias concretas para lograr esta meta, dejando la situación en Gaza tan incierta como antes de su propuesta.
