Disney despide a 45 empleados venezolanos tras cancelación del TPS
El panorama laboral para algunos residentes en Florida se ha complicado; la incertidumbre llega de la mano de recientes cambios en las políticas migratorias, afectando de manera directa a trabajadores con permisos temporales
La incertidumbre golpea a 45 empleados venezolanos de Walt Disney World en Orlando. Una decisión de la Corte Suprema de Estados Unidos, que permite la revocación del Estatus de Protección Temporal (TPS) para ciudadanos venezolanos, ha puesto en jaque a estos trabajadores y ha generado un debate sobre las implicaciones para la fuerza laboral estadounidense.
Disney, en un movimiento que ha causado controversia, ha colocado a estos empleados en licencia sin sueldo a partir del 20 de mayo, dándoles 30 días para obtener un nuevo permiso de trabajo. De no conseguirlo, sus contratos serán rescindidos. Aunque la compañía confirmó que los empleados mantendrán sus beneficios de salud durante este período, la medida deja entrever la presión que enfrentan las empresas ante las complejidades del sistema migratorio.
El fallo de la Corte Suprema, que anuló una orden judicial que bloqueaba la cancelación del TPS, ha creado una situación jurídica ambigua. Mientras The Los Angeles Times reporta que el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) puede proceder con la revocación, The Miami Herald destaca que aún no se ha emitido una resolución formal por parte del DHS, dejando a empleadores y trabajadores en una situación de incertidumbre.
Esta situación afecta la extensión del TPS otorgada por la administración Biden en 2023, que protegía a más de 350,000 venezolanos. Bloomberg advierte sobre las posibles consecuencias para diversos sectores, especialmente el alimenticio y turístico, que dependen en gran medida de trabajadores con permisos temporales. Se teme un impacto significativo en la oferta laboral y posibles aumentos de precios.
La situación deja a los venezolanos con TPS con pocas opciones. Muchos han buscado asilo político, un proceso largo y complejo que podría proporcionarles permisos de trabajo, pero no todos han tenido la oportunidad de iniciar este trámite. La precariedad de su situación migratoria se refleja en sus vidas y en la economía estadounidense.
El juez federal Edward Chen, según Fox Business, cuestionó la decisión del DHS, señalando la “total falta de sustento probatorio”. Este caso, lejos de resolverse, plantea interrogantes sobre la política migratoria y sus efectos en las empresas y en los miles de venezolanos que residen en Estados Unidos.
El futuro de estos 45 empleados de Disney, y de miles de venezolanos en situaciones similares, pende de un hilo, mientras la incertidumbre sobre el futuro del TPS y el proceso legal continúa. Las repercusiones económicas y sociales de esta situación aún no se vislumbran completamente y prometen tener un impacto de largo alcance.
