Texas destina 6500 millones de dólares más a seguridad fronteriza: el debate se intensifica

El panorama financiero de Texas está generando debate; mientras la administración estatal destina recursos significativos a la seguridad fronteriza, la realidad en la frontera sur presenta un escenario complejo que invita a la reflexión

Texas destina 6500 millones de dólares más a seguridad fronteriza: el debate se intensifica

Con una disminución histórica en los cruces fronterizos ilegales, la polémica Operación Estrella Solitaria, impulsada por el gobernador Greg Abbott, solicita 6.5 mil millones de dólares adicionales. Esta nueva asignación, que se suma a los ya gastados 18 mil millones, ha generado un intenso debate en Texas.

La disminución del 94% en los cruces fronterizos en febrero, según datos de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP), con una cifra récord baja de 8,347, ha alimentado las críticas a la necesidad de un gasto tan exorbitante. Algunos, como la experta fronteriza Selene Rodríguez de la Texas Public Policy Foundation, aunque a favor de la seguridad fronteriza, exigen una mejor supervisión del gasto y cuestionan la necesidad de 5,000 guardias nacionales en la frontera si los cruces han disminuido drásticamente. "Si no necesita 5,000 guardias nacionales en la frontera, tal vez no los tenga allí," declaró.

Mientras tanto, el sheriff Thaddeus Cleveland del condado de Terrell, quien considera los fondos estatales como un "salvavidas" que le permitió contratar más agentes y adquirir vehículos, se muestra preocupado por el gasto futuro, especialmente con el regreso de Trump a la presidencia y su prometida ofensiva federal contra la inmigración ilegal. "Con el presidente Trump en la Casa Blanca, preveo que el gobierno federal gastará más dinero. La Legislatura estatal seguramente no debería tener que gastar tanto más," señaló.

El debate político se intensifica. Jim Henson, director del Proyecto de Política de Texas en la UT Austin, destaca que la "buena gobernanza y la responsabilidad fiscal no tienen mucho peso en comparación con la política de inmigración," señalando que mientras un 45% de los texanos cree que el estado gasta poco en la frontera, ese número se eleva al 63% entre los republicanos. Esta polarización se refleja en la propuesta de la representante demócrata Ana-María Rodríguez Ramos de destinar parte de los fondos a mejorar los salarios de los maestros, una propuesta inmediatamente rechazada.

El aumento de costos asociados a nuevas políticas estatales, como la prohibición de fianzas para inmigrantes indocumentados acusados de delitos graves, también preocupa a senadoras como Sarah Eckhardt. Dos proyectos de ley que solicitan auditorías a la Operación Estrella Solitaria se encuentran estancados, sin haber recibido una audiencia hasta mediados de abril. La representante Rodríguez Ramos, en una crítica mordaz, comentó: "Podríamos darles un billón de dólares, y aún así llorarían con esta tontería de carne roja".

La CBP atribuye la reducción histórica de cruces fronterizos a las políticas de deportación de la administración Trump, lo que añade otra capa de complejidad al debate sobre el gasto en seguridad fronteriza en Texas. El futuro de los 6.5 mil millones de dólares adicionales, y el mismo futuro de la Operación Estrella Solitaria, pende de un hilo en medio de una profunda división política y la incertidumbre sobre la verdadera necesidad de un gasto tan significativo.