Andrea Nicolás, hijo de Paulina Rubio, asiste a campamento en España por orden judicial

La vida familiar de las celebridades suele estar bajo el microscopio, pero pocos casos generan tanto revuelo como los que involucran custodias legales y batallas judiciales; esta vez, el centro de atención es Andrea Nicolás, el hijo adolescente de Paulina Rubio y Nicolás Vallejo-Nágera, cuya situación ha sido regulada por un tribunal de Florida tras una audiencia clave

Andrea Nicolás, hijo de Paulina Rubio, asiste a campamento en España por orden judicial

Un juez de Miami-Dade ha ordenado un periodo de separación temporal para un menor, hijo de la cantante Paulina Rubio, en un campamento de verano en España, del 17 al 31 de julio. Esta medida, según fuentes cercanas al caso, busca proteger su bienestar emocional ante una situación familiar compleja. La decisión judicial rechaza las especulaciones sobre una pérdida de custodia por parte de la artista, aclarando que se trata de una solución provisional y consensuada.

A continuación, se detallan los puntos más importantes de la resolución:

  • El menor permanecerá en un campamento especializado en España, sin contacto con sus padres durante su estancia.
  • Las restricciones previas sobre su pasaporte y movilidad internacional se mantienen intactas.
  • El adolescente continuará sus sesiones de terapia virtual con la Dra. Laura Vigil.

La audiencia del 7 de julio, en el Tribunal del 11º Circuito de Miami-Dade, incluyó a ambas partes, sus representantes legales y la tutora ad litem, Amber Glasper. Testimonios presentados en la corte persuadieron al juez de la necesidad de un "paréntesis" en la dinámica familiar actual para el menor.

La corte de Florida mantiene la jurisdicción exclusiva sobre el caso, impidiendo cualquier acción legal en España durante la duración del campamento. Al regreso a Miami, Paulina Rubio reanudará el régimen de visitas estipulado en el Plan de Parentalidad. El documento judicial incluye una disposición clave: el menor tendrá acceso a un teléfono para comunicarse con su padre y con la tutora ad litem, garantizando la transparencia del proceso.

Finalmente, la resolución judicial enfatiza que este viaje no modifica las condiciones legales establecidas previamente, siendo únicamente una medida cautelar para salvaguardar el bienestar del menor.