Lucero: 55 años, abuela en potencia y una carrera intacta
El brillo de los reflectores se siente diferente a los 55 años. La perspectiva cambia, las prioridades se reordenan
El tiempo, ese escultor implacable, ha moldeado la figura de Lucero, dejando tras de sí una estela de éxitos y una madurez que se refleja en su mirada. Su sonrisa, esa misma que cautivó a generaciones, ahora lleva consigo la serenidad de quien ha transitado un camino largo y exitoso.
La alfombra roja de la premier de "Nuestros Tiempos," el nuevo filme de Netflix que la reúne con la pantalla grande, fue el escenario perfecto para presenciar este nuevo capítulo de su vida. Rodeada de flashes y aplausos, Lucero no solo habló de su trabajo, sino que reveló un anhelo entrañable que la llena de ilusión: la posibilidad de ser abuela.
La talentosa cantante y actriz, ícono de la música y la televisión, compartió con Televisa Espectáculos su deseo más profundo: “Sueño con que mi legado, mi nombre, todo lo que he hecho, se pueda reflejar en mis nietos, bisnietos... Quién sabe”, confesó con una emoción genuina. Si bien ese momento aún está lejano, la idea la llena de una inmensa alegría.
Este anhelo, lejos de ser una simple declaración, muestra la faceta personal de una mujer que ha construido una sólida y brillante carrera artística. Sus éxitos como intérprete de temas memorables y sus icónicos papeles en telenovelas marcaron una época. Sin embargo, para Lucero, la mayor satisfacción reside en el amor familiar: sus hijos, Lucerito y José Manuel, son su mayor orgullo y su motor.
Al reflexionar sobre su trayectoria, la artista expresa una profunda gratitud: "Estoy enormemente agradecida, satisfecha y orgullosa. Si pudiera viajar al pasado, no cambiaría absolutamente nada. Me quedaría con todo exactamente como fue", afirmó con convicción. Un recorrido lleno de triunfos, retos y aprendizajes que la han forjado y conducido a este presente pleno y esperanzador.
Más allá de los escenarios y las cámaras, Lucero se muestra como una mujer íntegra, con una visión clara de su futuro, lista para abrazar lo que venga con la calma y la experiencia de quien ha vivido una vida plena, exitosa y, sobre todo, llena de amor.