Detroit elimina a Cleveland en la serie divisional con jonrón de Dillon Dingler
Los Guardianes de Cleveland protagonizaron la mayor remontada en campaña regular en la historia de las mayores, al reclamar el título de la División Central de la Liga Americana después de estar 15 juegos y medio detrás de Detroit a principios de julio y 11 juegos abajo a inicios de septiembre.
Dillon Dingler, un joven receptor de Ohio, se convirtió en el protagonista inesperado al conectar un jonrón solitario que desató la ofensiva de los Tigres de Detroit en la sexta entrada, sellando la derrota de Cleveland en el partido decisivo de la serie divisional.
"Recordaré los buenos momentos del año, no lo que pasó hoy", expresó un abatido Steven Kwan, estrella de los Guardianes, mientras recogía sus cosas en un vestuario impregnado de frustración. A pesar de haber remontado un déficit de 15.5 juegos en julio, Cleveland no pudo llevar ese impulso a octubre, cayendo rápidamente ante un equipo de Detroit que no mostró piedad.
Los números fueron contundentes: un promedio de bateo de apenas .178 en la serie, 16 hits en tres juegos y solo 5 carreras anotadas, todas concentradas en la octava entrada del Juego 2. José Ramírez, la cara de la franquicia, intentó levantar los ánimos, pero su mirada reflejaba el dolor de otra oportunidad perdida. "Va a doler mucho, pero creo que podemos mejorar. Siempre te sientes mal después de esto, pero tienes que mantener la cabeza en alto", comentó, aunque sus palabras no lograban ocultar la decepción.
El bullpen, que había sido una de las fortalezas de Cleveland, mostró grietas en los momentos más cruciales. Erik Sabrowski y Hunter Gaddis, que normalmente eran confiables, permitieron cuatro carreras claves en la séptima entrada del partido definitorio. La ausencia de Emmanuel Clase, suspendido por la investigación de apuestas, pesó enormemente sobre el equipo en esos momentos decisivos.
Por otro lado, A.J. Hinch, el manager de Detroit, no escondió su satisfacción al final del partido. "No tuvieron a nadie que pudiera lanzar tres días seguidos como nosotros. En algún momento, la intensidad te alcanza", dijo, resaltando la diferencia en la resistencia de los equipos y dejando en claro lo que pudo haber sido para Cleveland.
Al apagarse las luces del estadio, surgía la pregunta que nadie dentro de la organización de Cleveland quería abordar: ¿Es suficiente con lo que tienen, o necesitan reforzarse para romper una sequía de 76 años sin llegar a la Serie Mundial?