Muerte por tortura de niña de 10 años en Arizona: Padres arrestados

Los detalles que emergen son tan desgarradores que cuesta creer que una niña de 10 años haya sufrido tanto antes de morir. Rebekah Baptiste, cuyo nombre ahora grita justicia, fue encontrada inconsciente el 27 de julio en Holbrook, Arizona, con heridas que los médicos no dudaron en calificar como "tortura"; tres días después, su corta vida se apagó en un hospital, sola

Muerte por tortura de niña de 10 años en Arizona: Padres arrestados

Una sonrisa dulce, ahora solo un recuerdo. Así recuerdan a Rebekah, una niña de apenas seis años, cuya trágica muerte ha sacudido a la comunidad y expuesto las fallas de un sistema diseñado para proteger a los más vulnerables.

Según documentos judiciales, la pequeña presentaba:

  • Desnutrición y deshidratación severas
  • Uñas de los pies arrancadas
  • Moretones en todo el cuerpo
  • Posibles signos de abuso sexual

Los acusados son Richard Baptiste, su padre biológico, y Anicia Woods, su pareja sentimental. Ambos enfrentan cargos por homicidio en primer grado. El horror se profundiza al conocerse que la escuela de Rebekah, Empower College Prep, había alertado al Departamento de Seguridad Infantil (DCS) 12 veces sobre posibles maltratos, sin recibir una respuesta efectiva.

"Doce veces. Doce oportunidades perdidas para salvar a mi sobrina", expresó Damon Hawkins, tío de Rebekah, la voz entrecortada por el dolor. Imágenes compartidas por la familia muestran una niña radiante, un contraste desgarrador con la crueldad que terminó con su vida. Ahora, su historia sirve como un grito silencioso ante la indiferencia de un sistema que falló, catastróficamente.

Durante la audiencia, los fiscales revelaron la confesión de Woods, quien admitió haber golpeado a los niños. Los dos hermanos menores de Rebekah, también víctimas de abuso, se encuentran bajo custodia estatal. Un informe médico preliminar apunta a una hemorragia interna como causa de la muerte, aunque el examen final podría demorar hasta un año.

Empower College Prep, en un comunicado, expresó su profunda consternación y responsabilizó al DCS por la falta de acción ante sus repetidas alertas. El DCS, por su parte, emitió una declaración genérica, evitando asumir responsabilidades directas por esta tragedia evitable.

Baptiste y Woods permanecen detenidos con una fianza de un millón de dólares cada uno. La comunidad exige respuestas y justicia, mientras la familia de Rebekah se enfrenta a una larga batalla legal. La herida del caso de Rebekah es profunda, una marca imborrable en el sistema de protección infantil, y un recordatorio desgarrador de la fragilidad de la vida de los niños más indefensos.